Diosa Amunet - Mitología egipcia

  • Compartir Este
Stephen Reese

    En la mitología egipcia, Amunet era una diosa primordial que precedió a los grandes dioses y diosas de Egipto y que tenía conexiones con los dios creador Amón Su figura era importante en todos los asentamientos importantes de Egipto, como Tebas, Hermópolis y Luxor. Aquí se ve más de cerca.

    ¿Quién era Amunet?

    En el antiguo Egipto, había un grupo de ocho deidades principales conocidas como la Ogdoad. La gente las adoraba como las deidades del caos en Hermópolis, una ciudad importante durante la mayor parte de la época faraónica. Consistían en cuatro parejas de hombres y mujeres, representadas durante el Período Tardío por ranas (macho) y serpientes (hembra). Cada pareja simbolizaba diferentes funciones y atributos. Aunque se ha intentadopara designar un concepto ontológico claro a cada uno de los pares, éstos no son consistentes y aún son poco conocidos.

    Al principio de su culto, los Ogdoad, y por tanto Amunet, no eran deidades sino principios que precedían a los mitos de la creación. Sólo más tarde estos principios vitales se encarnaron en dioses y diosas. Una de las parejas sagradas, la de Qerh y Qerhet, fue sustituida más tarde por el dios carnero Amón y su homólogo femenino, Amunet.

    Amunet era la diosa del aire, y la gente la asociaba también con la invisibilidad, el silencio y la quietud. Su nombre en el antiguo idioma egipcio significa ' el oculto Amunet era una diosa, un concepto y, como ya se ha dicho, la forma femenina de Amón.

    En algunos textos encontrados fuera de la ciudad de Tebas, se decía que no era la consorte de Amón, sino del dios de la fertilidad Min. Después del Reino Medio, Amón comenzó a asociarse también con la diosa Mut, y Amunet fue considerada su consorte únicamente en Tebas.

    Representaciones de Amunet

    Al igual que las demás deidades femeninas de la Ogdoada, las representaciones de Amunet la mostraban como una mujer con cabeza de serpiente. En algunas representaciones, aparecía con la forma completa de una serpiente. En otras obras de arte y escritos, representa el aire como una diosa alada. Otras representaciones la mostraban como una mujer con cabeza de vaca o de rana, con una pluma de halcón o de avestruz sobre la cabeza para simbolizar su jeroglífico. En Hermópolis,donde su culto era más importante, a menudo aparecía como una mujer que llevaba la corona roja del Bajo Egipto.

    Amunet en los mitos

    El papel de Amunet en los mitos estaba relacionado con las hazañas de Amón. Amón y Amunet no se consideraban figuras en el desarrollo de la mitología egipcia en sus inicios. Sin embargo, la importancia de Amón fue creciendo hasta convertirse en un dios asociado al mito de la creación. En este sentido, la importancia de Amunet creció exponencialmente en conexión con Amón.

    Debido al significado de su nombre (La Oculta), Amunet se asoció con la muerte. La gente creía que era la deidad que recibía a los muertos a las puertas del Inframundo. Su nombre aparece en los textos de las pirámides, una de las expresiones escritas más antiguas del Antiguo Egipto.

    Con la creciente popularidad de Amón, Amunet pasó a ser conocido como el madre de la creación Los egipcios creían que el árbol, del que surgía toda la vida, salía de Amunet. En este sentido, fue una de las primeras deidades en pisar la tierra y fue primordial en sus inicios. Aunque algunos estudiosos creen que fue una invención posterior en los mitos, se recuerda su nombre y su papel en los primeros acontecimientos de la mitología egipcia.

    Mientras que la Ogdoad era popular en Hermópolis y los asentamientos de los alrededores, Amunet y Amón recibían elogios en todo Egipto. Eran los protagonistas de algunas de las historias de la creación más difundidas del antiguo Egipto.

    Simbolismo de Amunet

    Amunet representaba el equilibrio que tanto valoraban los egipcios. La deidad masculina necesitaba una contrapartida femenina para que pudiera existir el equilibrio. Amunet representaba los mismos rasgos de Amón, pero lo hacía desde el lado femenino.

    Juntos, el dúo representaba el aire y lo oculto. Como dioses primordiales, también representaban el poder de superar el desorden y el caos, o de crear orden a partir de ese caos.

    Culto a Amunet

    Aunque era conocida en todo Egipto, el lugar central de culto de Amunet, junto a Amón, era la ciudad de Tebas. Allí, la gente adoraba a las dos deidades por su importancia en los asuntos del mundo. En Tebas, la gente consideraba a Amunet como la protectora del rey, por lo que tenía un papel destacado en los rituales de coronación y prosperidad de la ciudad.

    Aparte de esto, varios faraones ofrecieron regalos y estatuas a Amunet. El más famoso fue Tutankamón, que le erigió una estatua. En esta representación, aparece con un vestido y la corona roja del Bajo Egipto. Incluso hoy en día, las razones exactas por las que el faraón construyó eso para ella no están claras. También hubo festivales y ofrendas tanto a Amunet como a Amón en diferentes épocas y diferentes regionesde Egipto.

    En resumen

    Aunque Amunet no sea una figura tan destacada como otras diosas del Antiguo Egipto, su papel como madre de la creación era fundamental. Amunet fue importante en la creación del mundo y su culto se extendió. Fue una de las deidades primordiales y, en la mitología egipcia, uno de los primeros seres que recorrieron el mundo.

    Stephen Reese es un historiador especializado en símbolos y mitología. Ha escrito varios libros sobre el tema y su trabajo ha sido publicado en diarios y revistas de todo el mundo. Nacido y criado en Londres, Stephen siempre tuvo un amor por la historia. De niño, pasaba horas estudiando detenidamente textos antiguos y explorando antiguas ruinas. Esto lo llevó a seguir una carrera en investigación histórica. La fascinación de Stephen por los símbolos y la mitología surge de su creencia de que son la base de la cultura humana. Él cree que al comprender estos mitos y leyendas, podemos comprendernos mejor a nosotros mismos y a nuestro mundo.